lunes, septiembre 29, 2008

shake II

Al filo de la media noche recorro el camino de siempre,
oyendo el crujir incesante del pasto ya congelado por la helada.
Mis pasos se vuelven más y más pesantes hasta que me inmovilizo por completo.
El quebranto del pasto se extiende hacia mis venas.
Una a una se petrifican y se van punzando.
Me contraigo, me rompo...
puedo escuchar el crujir cristalizado en cada una de mis células.
Me reduzco al mínimo, me asfixio.
.
El aliento del guardián amarillo me ayuda a abrir los ojos.
Tendida a la mitad del campo reconozco inmediatamente a Venus.
Sé bien que es ella pues no titila.
Su brillo no le pertenece,
(es solo un pálido reflejo que le presta el sol,
para que se vista cuando él no está).
.
Entiendo su tristeza.
Con un nudo en la garganta,
me abrazo a mi guardián
y
sigo
caminando.

domingo, septiembre 28, 2008

shake

Caminando por el parque, repentinamente una nube se introduce en mi cabeza.
Su densidad aumenta de pronto y todo se convierte en blanco.
Mis ojos vislumbran un paisaje desolado, inerte, con ráfagas punzantes de un viento azuloso.
La nube es ahora un iceberg del que emana un frío congelador.
Me jala.
Me resisto.
Abro la boca para tratar de respirar y mi lengua se hiela por completo.
Adormecida se sacude junto con todo mi cuerpo, que no resiste más el frío.
.
Desde la banca que acogió mi lucha, contemplo al cuervo profundamente negro.
Al mismo de siempre.
Es el cuervo de ojos ambarinos, al que la señora del puesto suele regalar tortillas cortadas en trozos.
Uno, dos, tres brinquitos escoge la tortilla.
Uno, dos, tres brinquitos regresa al charco.
La remoja por un lado y espera.
La voltea y se remoja por el otro.
Se la come, la disfruta.
Va por otra más y repite el ciclo.
Pienso que su alimento podría llamarse "charcoquiles".
Le sonrío.
Se da cuenta y clava sus ojos en los míos.
"...no te vayas todavía..."
Me dijo suavemente y,
Uno, dos y tres brinquitos, fue por la siguiente tortilla.

domingo, septiembre 14, 2008

emigrando

De alguna u otra forma
todos somos emigrantes.
Estamos solo de paso en esta existencia
efímera y transitoria.

sábado, septiembre 06, 2008

Sibileando


Tierra esférica, con diferentes estaciones al mismo tiempo.
Hildegard Von Bingen.
.
En general, me gustan las personalidades creativas. No me importa mucho el género o la época, lo que me apasiona en realidad es la capacidad del ser humano para crear. Sin embargo, en esta ocasión que redescubro a Hildegard mi admiración se duplica, por una parte la creadora y por otra la mujer. Al ser la décima hija de la familia sus padres la entregaron a los 14 años como "diezmo" a la iglesia, y desde entonces su vida giró en torno a la religión, y estamos hablando además de la religión en la época medieval, substancialmente diferente a la de ahora.
Hildegard hizo de todo. Al parecer desde pequeña tuvo visiones que la iglesia avaló como "inspiradas por Dios" (gracias al cielo porque sino la habrían quemado por hereje); y a partir de éstas nace toda su creación. Al parecer, en estas visiones no solo percibía colores y formas, escuchaba también música y una voz que le narraba o le decía lo que tenía que hacer con el contenido de la visión. Su obra musical es cautivadora, en especial yo adoro sus "Cantos de Ecstasy´s" y conozco bien el "Ordo Virtutum". Se ganó mi total admiración por ella en esta obra; porque a pesar de la época, las tradiciones, los prejuicios... valientemente le da un papel importante al diablo y lo personifica de una manera extraordinaria, cuando uno lo oye por primera vez puede llevarse un susto de muerte. Además compuso también un oratorio, y es sorprendente porque esta forma musical en realidad comenzó a usarse hasta el siglo XVII.
Hildegard también fue literata, no sólo escribió sobre religión o poesía; sino también sobre plantas, cosmología, sexualidad, alquimia, etc. Además se inventó todo un alfabeto nuevo y una lengua secreta "Lingua ignota". Pintaba, dirigía el convento, tallaba piedras preciosas, aconsejaba al Papa, mandaba amenazadoras cartas a Federico I, hacia grandes viajes para predicar, lo cual sorprendía a todos, porque las abadesas nunca salían. Yo pienso que Hildegard quería ver un poco el mundo, nutrir sus sentidos con la vida real y enriquecer así sus visiones, empaparse de la fuente de su fuerza creadora.
El próximo 17 de septiembre se celebra el aniversario de su muerte, murió en 1179. La iglesia la canonizó y bueno, ese es el día de su santo también. Qué mejor homenaje que apreciar su obra.